Para aquellos de vosotros que aún no lo sabíais, he estado 8 días de vacaciones en Cuba. Aunque decir vacaciones es un poco exagerado, porque se supone que las vacaciones son para descansar, y yo he vuelto casi más cansada de lo que me fuí, y con un ligero (ja!) jet-lag que, 5 días después de mi regreso, aún me da guerra.
Pues eso, que ya he vuelto. Se ha hecho un poco difícil la reincorporación a la rutina, sobre todo por lo del horario intensivo de verano (amanecer a las 7:00...uf, no lo hacía desde el proyecto fin de carrera), pero las tardes libres lo compensan.
En breve escribiré aquí un resumen de mi viaje, para aquellos a los que no voy a poder contárselo en persona. Sólo deciros que ha sido una experiencia increíble, que conocer a Mahité (¿que aún no he hablado aquí de Mahité?! No tengo vergüenza) y a su familia (que ahora más que nunca considero también la mía) ha sido uno de los momentos más emocionantes de mi vida, y que mi sobrinita adoptiva es
la cosa más linda del mundo (y no es amor de tía, soy totalmente objetiva).
Creo que este viaje me ha aportado mucho, y que el náufrago que ha vuelto es diferente de la que se fue. Al menos, eso espero.
No cambien de canal. Mañana, más. ;)
P.D. ¿No resulta un poco irónico que este náufrago, para descansar de su "isla virtual"...se vaya precisamente a una isla real?:P
